Fürstenfeld
6 de Septiembre.- Sí: esto que se ve en la imagen es un karaoke. Mi compañero de trabajo sueco (ahora ex-compañero) tras una ingesta suficiente de alcohol, que hizo que su flema de lord inglés se derritiera, pidió ir a un karaoke. Pero, ¿Quería él interpretar los grandes éxitos de ABBA, buque insignia de la armada pop sueca? ¡No! ¿Querría, acaso, acogerse a lo que todo el mundo se acoge, y destripar algún viejo éxito de Federiquito Mercurio, el líder de la Reina entre las Reinas? ¡Tampoco! Mi buen amigo G., lo que ardía en deseos de interpretar (con la voz un poquitín pastosa, pero con una dicción aceptable) era ¡La bamba! Y allá que nos subimos él y yo al canijo escenario e hicimos una versión del tema, que, mal está que yo lo escriba, coreó todo el local.
Un local en el que había un grupo de postadolescentes sudamericanos abonados a las canciones de Juanes; y en el que un grupo de ciudanos del imperio cantaba una cosa que se llamaba Fürstenfeld, de STS. La cosa empieza flojilla, pero luego se anima, y estas criaturas de STS suenan un poco como una Radio Futura centroeuropea. Molan en el vídeo las imagenes del distrito uno y esas pintas que tenían los vieneses cuando Lady Di se ennovió con el príncipe Cal-los. Por cierto, no reirse mucho de las dichas pintas, porque el sector proleta de Viena aún las conserva. Y es que por los Mundl no pasan los años (otro día cuento quién es Mundl, que mola).



2 comentarios:

amelche dijo...

¿Qué tendrá la Bamba que a todos los guiris les gusta? Era la única canción en español que tenían por Irlanda (aparte de las Ketchup y la Macarena, pero eso fue años después), en Francia nos la pusieron en el restaurante donde íbamos a cenar todas las noches (durante la semana que estuvimos en los Alpes) y ahora me entero de que a los vieneses también les encanta.

Paco Bernal dijo...

La bamba tiene que sale en una peli y que la letra es fácil (aparte del ritmillo) jejeje. Ayer me contaron que la canción de STS del vídeo la escuchó un aborigen en la lejana Bolivia...En medio de la nada.
Saludetes