Como el lector verá, estas cosas también pasan en Austria y forman parte de los sacrificios que han de hacer "los que mandatan"
El Afoto (*)
(*)Este post debió publicarse ayer, pero otros deberes me lo impidieron. Allá va
25 Septiembre.- Un simpático lector, cuyo nombre mantendremos en el economato, me pide que comente la noticia del día en España (o, por lo menos, la noticia a la que los medios han prestado mayor atención).
Como soy débil, no he sabido negarme, a pesar de que la noticia en cuestión, en principio, tiene poco que ver con la temática de este blog; aunque sí con algunas de las cuestiones que, durante estos casi tres años, he tratado de vez en cuando. He aquí los hechos:
Durante un viaje oficial a los Estados Unidos con motivo de la cumbre del G-20, el presidente del Gobierno español, Sr. D. Jose Luis Rodríguez Zapatero y su esposa, Sra.Da Sonsoles Espinosa, acudieron, parece ser que a título personal, a una representación en el Metropolitan Opera Hause, en donde coincidieron con el matrimonio Obama.
Parece ser también que, como el presidente español es hombre abierto y simpático, que en todo caso admira al presidente del Gobierno americano, se las arregló para comunicarle (por señas: no habla inglés) que era su deseo y el de su mujer hacerse una foto de grupo para que quedase testimonio gráfico de la concordia que reina entre los mandatarios de ambas naciones (y sus santas).
Hasta aquí, todo normal.
Pero es que a la imagen también se unieron las hijas del matrimonio Zapatero-Espinosa, de 13 y 16 primaveras.
La foto fue realizada por un profesional de la Agencia EFE que, con la inmediatez que caracteriza a los tiempos de internet, remitió la fotografía a sus jefes (que se frotaron las manos). En esto que la agencia española recibió un telefonazo procedente de las alturas para que se impidese la difusión a los medios de la instantánea; porque es bien sabido que, tanto el Sr. Zapatero como su esposa han intentado desde siempre mantener a sus hijas alejadas del torbellino mediático en el que ellos, por causa del trabajo del cabeza de familia, no tienen más remedio que vivir.
La difusión de la foto se paró lo antes posible pero (Ay, que diría Antonio Gala) la influencia del gabinete de prensa de Moncloa no llega hasta la web americana que publicó la foto en origen, y de ahí ha saltado a los medios españoles que, cumpliendo la ley, han publicado la instantánea con las caras de las niñas distorsionadas (aunque de una de ellas se puede decir sin temor a equivocarse que tiene una sonrisa –califíquela cada uno como quiera- clavadita a la de su padre).
Lo que ha causado la polémica (y los malintencionados y crueles comentarios) de los periodistas y del pueblo soberano, ha sido la indumentaria que lucían las hijas del matrimonio presidencial español.
Las dos chicas acudieron al Metropolitan vestidas de negro al gótico modo y con botorros militares (no quiero que se vea en este aumentativo ningún ánimo despreciativo: es una descripción gráfica). Esta coartada ha servido para que, los que antesdeayer se hacían lenguas de lo bien que le sentaba el pareo playero a la señora de Aznar o de lo fina que posaba su hija con la cara de becerrilla feliz que se te pone cuando tienes un marido con varios miles de millones en el banco, hayan atacado ferozmente la elección (valiente, audaz, poco ortodoxa, para qué que negarlo) de las hijas de Jose Luis Rodríguez Zapatero.
Dejando aparte que es bastante sucio (y dudosamente ético) atacar al santo por la peana y cebarse con Zapatero a través de sus hijas; esta foto plantea otras preguntas de más calado como por ejemplo: de la imagen se deduce que tanto Zapatero como Espinosa han inculcado a sus hijas un espartano concepto de la estética, un desprecio por todas las convenciones burguesas (¿A la ópera? ¿Por qué hay que arreglarse para ir a la Ópera?), un personal concepto de la expresión corporal, y un aprecio por los valores interiores de las personas muy acorde con la ideología progresista que (teóricamente) profesan.
Pero, ¿Esas niñas no estudian? ¿Pueden permitirse hacer una semana de pellas porque sus padres vayan a NY? Yo no podía ¿Ha de deducirse de ello que su padre, de forma muy consecuente por otra parte, siente el mismo aprecio por el porvenir académico de sus hijas que el que parece sentir por el del resto de los chiquillos españoles? ¿Piensa que por ser quien son podrán dedicarse sin problemas en el futuro a las profesiones más populares entre la juventú modelna? (a saber: concursante de Gran Hermano o Tertuliana en un programa de higadillos/corazón).
En Austria, país que brilla, como saben mis lectores, por el respeto a la vida privada, trascendió hace meses una foto de la hija del canciller Gussembauer en la que posaba con cara de tocinilla inocente y se supo también que, a pesar de que su padre ocupaba el segundo puesto de trabajo más cotizado de la República Austriaca, ella no es que brillase en las aulas precisamente (que estuviera gordita escandalizó menos que esto). Ipsofactamente, se le aplicó un severo programa de reeducación para dejarla a) como una sílfide y b) para que recuperase las asignaturas suspensas.
¿Sufrirán la misma terapia de choque las hijas de Zapatero? ¿Marcarán una tendencia? ¿Impondrán el negro, las pulseras de cuero y los botorros en los acontecimientos operísticos? ¿Se relajará el serio mundo del protocolo? Una nueva era se ha abierto.
5 comentarios:
¡Qué vergüenza y qué bochorno, Herr Bernal!; todavía no salgo de mi asombro. Por lo pronto no estoy de acuerdo con la denominación que se aplicó a las mozas: «góticas». A tenor de los kilos y lorzas que intuimos en las damiselas, creo que estamos ante un ejemplo claro de barroco churrigueresco. Supongo, ¡y es mucho suponer!, que si alguna de ellas decidiera casarse en El Escorial, la ceremonia se celebraría en el pudridero Real, es lo adecuado cuando se viste ese porte indumentario. El resto de la polémica me parece un nuevo ejercicio hispano de «cogérsela con papel de fumar» y los dislates de un palurdo con ínfulas que ignora las normas elementales de presentación y representación. Acudir a una recepción oficial en el Museo Metropolitan no es un acto privado; por lo tanto, si alguien desea proteger la intimidad de sus hijas, lo mejor es que las deje en casa. La fotografía la realiza el fotógrafo oficial — Lawrence Jackson— y se exhiben en la web de la Casa Blanca y en la galería de imágenes del Dpto. de Estado de EE.UU. Asimismo, premiar a las barrocas con un viaje a gastos pagados por los sufridos y esquilmados contribuyentes españoles no es algo presentable, y más cuando el destino es la Asamblea General de la ONU, un lugar que en esas circunstancias se convierte en el sitio con mayor concentración de fotógrafos por metro cuadrado. Además, Herr Bernal, no es de recibo y sí una demostración de hipocresía que los mismos que censuran las fotos de las barrocas no demuestren pudor alguno en mostrar al hijo menor de Nicolás Sarkozy (Louis, 12 años de edad). En definitiva, estimado amigo, un espectáculo grotesco, pueblerino, zafio y digno de una película de Paco Mtez. Soria; en concreto de La ciudad no es para mí. ¡Qué poco charme y qué baja estofa!
Un abrazo.
Paco, me duelen los dedos de comentar este tema en los foros de Internet, así que haré un resumen. Los comentarios que desde ayer se han hecho (y se siguen haciendo) sobre estas niñas me parecen OBSCENOS. Estas niñas no tienen función institucional (es su padre el que la tiene) así que pueden vestir y hacer lo que les dé la gana. Yo, lo que veo en esa foto, es a dos niñas que no visten de forma convencional. Punto pelota. Prefiero 100 veces a esta familia que a las infantitas de las narices vestidas de repollo con su madre haciendo el paripé de mujer católica, religiosa, conservadora y monárquica cuando cree en ninguno de esos valores. Venga, hombre. Los insultos que he leído y escuchado sobre estas niñas han sido de traca (en la radio incluso la presentadora tuvo que pedir que la gente no enviara correos insultando a estas niñas porque no los leería). Tengo en casa la foto de las niñas sin pixelar y he de decir que, si bien el estilo de ropa que llevan no me gusta, me parecen dos niñas muy guapas (se parecen mucho a su padre; la morena tiene su misma expresión y me parece una monada). En cuanto a la polémica de la pérdida de privacidad, yo a estas niñas me las cruzo esta tarde por la calle y no las diferencio de otras que van vestidas igual. Además, si se sienten muy agobiadas, con vestirse con ropa "convencional" y cambiarse el peinado ya no las reconocerá nadie (cosa que no tendrían que hacer: si quieren ir vestidas así, que vayan; no hacen daño a nadie). La de maldades que se han llegado a decir han sido de traca. A mí no me produce ningún bochorno esta foto (anda que no se han visto cosas peores de otros dirigentes). En fin, buenas tardes. Ya te mandaré la foto del lugar de conexión.
Es increible que aún estemos así, esta explosión de odio carnavalero, de risas maliciosas, de atacar a alguien con todo, sin detenerse ante nada, y solo por algo tan nimio como el estilo de ropa o el peso corporal. Estoy de acuerdo contigo en que lo reprochable es, 1. quén paga el viaje de las niñas,2.es oportuno que falten a clase una semana. El resto de los detalles del asunto me parecen obscenos.
A titulo personal prefiuero un par de Goticas que una boda de estado en el escorial, y a poco que se piense...
Hola a los tres:
Gracias por vuestros comentarios.
El asunto daría para un post, pero voy a intentar resumir lo que pienso para que la cosa no se haga eterna:
A mi amigo El Pobre: estoy completamente de acuerdo contigo en que el resbalón se debe a un enorme déficit en materia de comunicación. Efectivamente: si quiere proteger la intimidad de sus hijas lo que tiene que hacer es dejarlas en casa. Y punto. Es más: dudo mucho que se pueda hablar de intimidad cuando van, se ponen, y posan. Todo el mundo sabe que, en el momento en que uno se acerca a ciertos personajes esas fotos se publican. Sean de Andreíta (la de cómete el pollo) o de quien sea.
Por cierto gracias por las precisiones sobre quién hizo la foto. Yo pensaba que era de la agencia EFE. Un abrazo:-)
A m. No estoy de acuerdo con algunas de las cosas que dices. Porque esas criaturas no tengan una función institucional no quiere decir que se puedan vestir como quieran. Cuando uno va a según qué sitios tiene que ponerse a la altura de las circunstancias. Para ir en bata y zapatillas, uno puede ir por su casa, pero para ir a un acto oficial uno se tiene que vestir con corrección aunque sea un ciudadano anónimo. Se llama decoro. Un concepto que está algo pasado de moda, pero en el que algunos aún creemos. Esta corrección en el vestir es una cuestión relacionada con la cortesía más elemental. Yo asumo que, cuando voy a la ópera, a las otras personas también les aprieta la corbata y les pica el cuello de la camisa, o les da calor la americana (no hablo de las molestias de las mujeres, porque no los he experimentado). Pero han tenido la cortesía (hacia mí, aunque no me conozcan) de arreglarse para la ocasión. Es más: me parece que es una cosa que los padres tienen el deber de inculcarles a sus hijos; porque sus hijos viven en sociedad y es beneficioso para ellos atenerse a según qué hábitos civiles.
Sí que estoy de acuerdo en que no hay que insultar a nadie. Y me parece que las chavalas, en este caso, están en una posición peor que otra gente porque no se pueden defender. Por eso creo que la gente debería de cortarse. Por otra parte a mí, personalmente,no me parecen guapas . En todo caso, me parecen unas chicas normales que estaban en una situación que, por falta de experiencia de sus padres, les ha caido encima.
a Joako: a mí, personalmente me parece que todo el asunto es una tormenta en un vaso de agua y estoy completamente de acuerdo en que lo importante es lo que tú dices. Si están gordas o flacas o si van vestidas como Alaska...En fin. Yo creo que les hubiera beneficiado más si hubieran pasado algo más desapercibidas (que eso, y no otra cosa, es la buena educación).
En cualquier caso, que una cosa así acapare la atención pública del modo en que lo ha hecho, da idea del nivel (abisal) al que ha descendido el debate político español.
En fin. Después de este manual de estilo, saludos a todos.
Vaya debate se ha abierto, eh?
Efectivamente esto da idea de en qué nos está convirtiendo la televisión a los españoles. Debemos agradecerselo a Mariñas, Karmele, Lidia Lozano ...
Aun así, y con la opinión de que cada uno puede vestir como le venga en gana, creo que también estoy con el decoro.
Para bien o para mal, la imagen no deja de ser un lenguaje (vale más una imagen que mil palabras), que hace que nuestro subconsciente, a veces, nos traicione.
Saludos.
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