Mírala cara a cara que es la 200
(Acto de contricción)
2 de Junio.- Pues sí: parece que fue ayer, y resulta que ya llevo doscientas entradas en este diario cibernético (últimamente, casi semanario). Quería, en primer lugar, agradecer a todas las personas que me leen su paciencia y su atención, y después, hacer propósito de enmienda, porque soy consciente de que algunas de las cosas que escribo aquí en lengua vernácula (de Austria, se entiende) no están transcritas con toda la pureza necesaria.
Así pues, hago el propósito dicho y, en tanto que mi alemán mejora, empiezo mi penitencia con una fe de erratas. En el blog dedicado al lenguaje vienés dije que sucio, guarro, etc, se decía Trekkig. Pues no, queridos amigos, no. Se dice Dreckig y suciedad, Dreck. Mi amigo el turco lo dice siempre, Scheisse und Dreck. Hecho esto, y dedicando esta entrada especialmente a mi amiga y señora Doña U., que me afeó con razón esta incuria que demuestro por el idioma alemán (besotes, corazón, espero que estéis bien), termino por hoy y me dedico a las labores propias del mantenimiento de mi vivienda.
1 comentario:
Vaya, vaya. Veo que los dos estamos de celebraciones. Ayer cumplí meine zwei Enten. :D Nada Paco, espero que podamos seguir disfrutando de 200 entradas más. Besos.
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