Maria Teresa seisdedos y los Táltos



22 de Febrero.- Uno siempre se congratula de que VD tiene unos lectores listísimos. Un gran número de personas han dado con la respuesta del pequeño enigma que planteaba el concursete: efectivamente, la emperatriz Maria Theresia está pintada con seis dedos en la mano derecha (los cinco que se ven  y el pulgar invisible que sujeta el vestido). Se convierte así la emperatriz en una mujer más de esa aguerrida saga cuyos últimos exponentes son Tamara/Ambar/Yurena y su madre, doña Margarita Seisdedos.

Rebuscando, sin embargo, he topado con una información que indica que quizá la decisión de pintar a la emperatriz tan digitalmente sobredimensionada no fuera una casualidad.


Parece ser que en la mitología húngara tradicional existe la figura del Táltos, similar a un chamán. De acuerdo con la obra del sacerdote católico Arnold Ipolyi, “Mitología magiar”, publicada en 1854, el Táltos sería un ser que estaría en contacto directo con la divinidad en el periodo prenatal. Una vez en este mundo, el Táltos tendría la misión de curar cuerpo y mente (como el Red Bull) de los miembros de su sociedad.

¿Y cómo se distinguiría a los Táltos? Hombres o mujeres, los Táltos se caracterizaban por haber nacido con algún rasgo singular, como por ejemplo seis dedos (tener once o doce en total) o por haber llegado al planeta Tierra con toda la dentadura completa.

Con la extensión del cristianismo, en torno al año 1000, la tradición del Táltos fue perseguida por el rey Esteban I de Hungría pero, aún así, se tiene constancia de que sobrevivió hasta la época de los Habsburgo. La emperatriz Maria Theresia, en un intento final de erradicar esta costumbre pagana de sus reinos, promulgó una ley por la cual se obligaba a sus súbditos húngaros a informar del nacimiento y eliminación de todos los bebés que nacieran con seis dedos.

Más curiosidades a propósito del Táltos: los dos más famosos fueron Kampó, que vivía en Timisoara y que ayudó al rey Matías de Hungría en sus guerras contra los turcos, y Göncöl, un ser de portentosa inteligencia que hablaba con los animales, que sabía leer los presagios en las estrellas y que inventó el carro. De hecho, los húngaros llaman “Carro de Göncöl” a lo que el resto de Europa conoce como Osa Mayor –por cierto, esta misma constelación se llamó durante toda la Edad Media “la carreta de Carlos”-.

Los Táltos tenían siempre un caballo, que aparece frecuentemente en las leyendas húngaras como un corcel blanco alado; sólo el Táltos sin embargo podía ver el poder que se escondía en el caballo y este permanecía oculto para el resto de los mortales que tenían diez dedos.

En fin: nuestro premio se va esta vez al Reino Unido, a la bonita ciudad de Southampton (puerto de donde, por cierto, partió el Titanic en su primera y última travesía).

Todas las informaciones de este post, están sacadas de este artículo de la Wikipedia que todo lo sabe.

2 comentarios:

Chus dijo...

Paco, reconozco que eres muy culto. Pero de todos los que hablas en tu entrada no me suena nadie, bueno miento, solo me suena la Margarita seisdedos, la del ladrillo en el bolso y que pegaba bolsazos a los periodistas, jajajajaja.

Bueno un besito y desde que estoy en ganchada a internet y tengo un blog (15 meses), no he vuelto a ver un programa basura. A Dios gracias. Prefiero leer sobre gente que no conozco, aunque a veces me cueste un poco, a oir las g...... que dicen hoy en dia en la tele, quitando alguna pelicula de la 1 y los documentales de la 2, la tele no vale nada.

Viena dijo...

Hola Chus!

Yo no soy culto, es la Wikipedia, que tiene de todo jajaja. En cuanto a lo de la tele, haces muy requetebién. La última vez que estuve en Celtiberia, a los tres días veía solamente el telediario de la primera y tele alemana. No te digo más.

Saludetes :-)